lunes, 24 de octubre de 2011
¿QUÉ ME VA A PASAR SI TENGO SIDA?
El VIH o virus del sida se caracteriza por su lenta progresión. Esto quiere decir que actúa tremendamente despacio hasta conseguir ponernos enfermos.
Cuando nos contagiamos por primera vez, se produce un cuadro clínico muy poco específico, parecido a una gripe común. Podemos sufrir fiebre, malestar general, dolores musculares y en general unos síntomas muy similares a los del popular 'trancazo', que desaparece espontáneamente en unos días.
Pero el mal ya esta hecho, el virus ha penetrado en nuestro organismo e irá minando poco a poco nuestro sistema de defensas contra las infecciones. Este ataque del VIH se produce a lo largo de meses, o incluso años, y durante este período somos capaces de llevar una vida totalmente normal sin notar ningún síntoma.
Sin embargo, llega un momento en que nuestras defensas han disminuido tanto que empezamos a no ser capaces de enfrentarnos a infecciones u otros procesos, que serían poco importantes para sujetos sanos.
El tiempo que tarda el virus en conseguir que nos pongamos enfermos es muy variable, y puede oscilar desde los pocos meses hasta años, aunque la media está en torno a los tres o cuatro años.
¿COMÓ TE CONTAGIAS? ¿COMÓ NO TE CONTAGIAS DEL SIDA?
Te puedes contagiar con el vih:
- si no usas un condón en una penetración anal o vaginal
- si chupas el sexo de un hombre o de una mujer sin protección plástica
- si compartes jeringuillas y agujas
- si una madre lo tiene durante el embarazo o si una madre que está infectada le da el pecho a su hija(o)
- por medio de besos, sudor, lágrimas
- por medio de abrazos
- por contacto con asientos de inodoros
- en las piscinas o albercas
- si donas sangre
lunes, 17 de octubre de 2011
¿CÓMO PUEDO EVITAR EL SIDA?
Evitando conductas nocivas o agentes estresantes que puedan deteriorar o afectar la salud, tales como las drogas, el alcohol, la poligamia, falta de sueño, exceso de trabajo, exposición a sustancias químicas o tóxicas, radiación u ondas de radio de alta intensidad, desnutrición, etc.
¿ENTONCES QUE ES EL SIDA?
El SIDA se refiere a “Síndrome de Inmuno-Deficiencia Humana” y es el estado más crítico del estado inmunológico de una persona. En este estado, el cuerpo estará propenso a contraer cualquier enfermedad, dado que no posee ningún tipo de defensa ni respuesta contra cualquier mal. CONCLUSIÓN El VIH no causa el SIDA, la verdadera causa es la exposición a agentes estresantes inmunológicos e inmunotóxicos, El SIDA es prevenible, tratable, controlable y erradicable. La conclusión es sencilla, entre menor sea el tamaño del concepto mayor es el nivel de entendimiento.
TRATAMIENTO Y PREVENCIÓN DEL SIDA
El enfoque del SIDA como enfermedad tóxica, nutricional y oxidativa permite que esta pueda tratarse, prevenirse y erradicarse en forma efectiva, fácil y barata (178,179), como se esta logrando en muchos paises.
RACISMO EN EL SIDA
Racismo. El hecho del incremento del SIDA en la comunidad negra americana y en las comunidades pobres del Africa, ha permitido que investigadores estadounidenses y europeos propongan que el SIDA se originó en el Africa debido a relaciones inapropiadas entre africanos y animales (153-155); para lo cual tampoco existe ninguna evidencia objetiva. Son simples concepciones racistas en las mentes de algunos investigadores que defienden al VIH como la causa del SIDA.
La corrupción de todas las esferas de la sociedad es otro factor que ayudó a que se cometiera el error y lo perpetua (156-159). Muchos investigadores trabajan no por el interés de servicio a sus semejates, sino por conseguir fama, reconocimientos y premios (156). El caso de la mala conducta científica del Dr. Robert Gallo del Instituto Nacional de Cancer de los Estados Unidos, en sus investigaciones para “inventar” (no descubrir) al “virus del SIDA” es de conocimiento de la comunidad cientifica internacional y del público (160). Además, se ha creado una industria del SIDA muy rentable y aquellos cientos de miles que se benefician de ella, se oponen y se opondrán con todas sus fuerzas a que se corrija el rumbo (161,162). Otro de los hechos que mas favoreció llegar al error cometido está en la crísis que vive el establecimiento científico y por consiguiente en sus fallas en la metodología investigativa, es decir, en el incumplimiento de los requerimientos epidemiológicos (163). Ninguno de los postulados en que se basa la teoría infecciosa del SIDA cumple los requisitos del método investigativo. El SIDA no cumple los postulados de Koch (164,165) ni los demás requisitos de la epidemiología para ser una enfermedad infecciosa (166-171). Ninguna de las bases de la hipótesis VIH-sida, ha sido demostrada a nivel objetivo. No son más que simples suposiciones teóricas creadas por las mentes de los generadores de esa teoría. Prácticamente, el mundo entero se acostumbró a creer todo lo que nos dicen los llamados hombres de ciencia. Infortunadamente en la actualidad, la capacidad crítica y de cuestionamiento de las personas es prácticamente nula. No se piden las pruebas necesarias para las afirmaciones aparentemente científicas y con frecuencia los asuntos de la ciencia se definen en ruedas de prensa (172-174). La peor epidemia que sufre el mundo contemporáneo, es una epidemia de crisis del establecimiento científico (172-177). Esta es mucho más extensa que la epidemia del SIDA. La creencia internacional de que el SIDA es una enfermedad infecciosa y de transmisión sexual, es una de las consecuencias de la crísis del establecimiento científico. Y sobrevendrán más consecuencias, a no ser que corrijamos el rumbo y tomemos una vía pavimentada con una metodología investigativa auténticamente objetiva. Muchas personas no se han enterado aún de esta polémica debido a la terrible censura que contra nuestros puntos de vista, infringen el Ministerio de Salud de Los Estados Unidos, la OMS y la ONUSIDA. La comunidad científica se ha equivocado muchas veces en el último siglo al considerar infecciosas muchas enfermedades que no lo son, como sucedió con la pelagra, el escorbuto y el beriberi, para mencionar sólo algunos ejemplos (10,18). El error cometido esta vez con el SIDA, tiene una magnitud muchisimo mayor por las repercusiones catastróficas sobre miles de personas que sufren de este síndrome tóxico/nutricional en diferentes grupos sociales de todos los continentes. La culpabilidad del error cometido con el SIDA, recae sobre algunos pocos investigadores e instituciones de salud del gobierno de los Estados Unido como los Centros para el Control de las Enfermedades (CDC) y los Institutos Nacionales de Salud, a los cuales les hace eco la Organizacion Mundial de La Salud y la ONUSIDA, estas dos últimas, agencias de las Naciones Unidas (ONU). La mayoría de las personas del mundo, simplemente le creyó ciegamente a los “hombres de ciencia” del norte. La OMS y la ONUSIDA reconocen que ha habido 25 millones de muertes por SIDA: muertes inecesarias que constituyen el mayor genocidio de la historia humana. Que horror: esta vez el genocidio se comete a nombre de la ciencia…
LAS PRUEBAS PARA EL VIH SON ADECUADAS
Las denomidas pruebas para el VIH (ELISA, Western blot, Carga Viral) no son sensibles ni específicas para detectar infección pasada o reciente con el VIH (36-39,41,139-142). Mientras no se haya aislado y purificado al VIH y mientras persista la duda acerca de su existencia como un virus verdadero, no es posible garantizar que los resultados positivos en estas pruebas indiquen infección por el VIH (37,39,41). Ni Luc Montagnier en el Instituto Pasteur de Paris, ni Robert Gallo en el Instituto Nacional de Cáncer de los Estados Unidos, ni Jay Levy en la Universidad de California aislaron al VIH como ellos lo sostienen en Science (41,143-145). Estos investigadores simplemente observaron en cultivos de linfocitos de personas con SIDA o a riesgo de desarrollarlo (estimulados con mutágenos y otros agentes oxidantes), algunas proteinas, algunas enzimas y fragmentos de ácidos nucleicos, pero jamás aislaron partículas virales libres e independiendes, pués ni siquiera siguieron los pasos establecidos internacionalmente para el aislamiento de retrovirus (146,147). Como pensaron que tenían a un virus desintegrado, con las proteinas aisladas prepararon antígenos para detectar anticuerpos en contra de estas proteínas que supuestamente pertenecerían al VIH (pruebas de ELISA y de Western blot); y con los fragmentos de ácido nucleico prepararon los reactivos para la prueba de PCR, llamada arvitrariamente “carga viral”. Sin embago, tanto las proteínas, las enzimas, como los frágmentos de ácidos nucleicos pueden perfectamente corresponder a “proteínas del estrés” (41,148-151) liberadas por las células de los cultivos estimulados u oxidados o por las células de las personas que han estado sometidas crónicamente a muchos retos antigénicos y tóxicos con el subsiguiente estrés oxidativo, como ocurre con los grupos de personas que con mayor frecuencia desarrollan el SIDA. Las personas que reaccionan positivamente en estas pruebas no están infectadas con el virus que supuestamente causa el SIDA, denominado arvitrariamente “virus del SIDA”. Estas personas reaccionan positivamente en dichas pruebas, por haber estado expuestas a muchos retos antigénicos y tóxicos y por lo tanto sus sistemas inmunes estan oxidados y debilitados y esta es la razón por la cual estas personas tienen un mayor riesgo de desarrollar el SIDA (17,18,41) y por lo tanto deberán tomar precauciones por el resto de su existencia. El fenómeno conocido como VIH es entonces un marcador de intoxicación crónica e inmunodeficiencia (19,24,41,152) pero no es la causa del SIDA, antes por el contrario, el fenómeno VIH es una consecuencia de la patogénesis del SIDA (19,22,24,41). Por lo tanto, ser “VIH positivo” o “Seropositivo” no indica estar infectado sino estar intoxicado u oxidado; no indica tampoco haberse “infectado” a través de sus relaciones sexuales, ni durante el embarazo, el parto ni la lactancia, nip or medio de sangre supestamente “contaminada con VIH”. Las personas VIH positivas tampoco tienen peligro de infectar a nadie, puesto que jamás se ha demostrado que el VIH sea un virus verdadero.
EL SIDA SE CURA
El VIH realmente no es la causa real del SIDA, de hecho ni siquiera existe, La enfermedad del siglo realmente es causada por agentes estresantes inmunológicos e inmunotóxicos, El VIH se puede considerar la mentira del siglo, que realmente fue un invento del R. Gallo, para frenar las especulaciones de las cientos de muertes que ocurrían en EE.UU. El SIDA por consiguiente es curable tratándose de la manera adecuada, a continuación explicaré los orígenes de la mentira del siglo, las teorías, y las formas de tratamiento efectivas que logran curar esta Enfermedad.
El VIH… invento del hombre
Era el año de 1984, una ola de pánico recorría el planeta como si se tratara de un caballo apocalíptico que cabalgaba sobre la constante información que los medios de comunicación divulgaban día y noche. Al gobierno estadounidense le urgía frenar el escándalo generado por las muertes de cientos de norteamericanos en todo el país -principalmente en las ciudades de San Francisco y New Jersey- a causa de que los sistemas inmunológicos de estos enfermos dejaban de funcionar llevándolos a un horrible estado de deterioro físico jamás visto antes en otra enfermedad; además, en este caso, sin que la medicina “moderna” tuviera explicación alguna. Hasta ese año se creía que sólo la población gay del planeta estaba en problemas ya que eran principalmente personas con preferencias homosexuales las que enfermaban por miles. Acababa de nacer una enfermedad nueva cuya característica era la inmunodeficiencia, se le bautizó con el nombre de SIDA (Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida). Como el nombre lo indica, los médicos que bautizaron a esta enfermedad y que seguían sin saber a ciencia cierta el origen del SIDA, desde el principio “supusieron” que el motivo para que una persona comenzara a enfermar y desarrollara “inmunodeficiencia” era “adquirirla”, es decir, que cabía la “posibilidad” de que existiera un agente transmisor del SIDA. Las cifras indicaban que para finales de 1993 la presencia de casos de SIDA se había reportado en 33 países; en E.U. se decía que existían 3000 casos de los cuales 1,283 habían muerto. El misterio envolvía a esta nueva enfermedad y por más que se trataba de encontrar su origen, los esfuerzos de miles de médicos en todo el mundo parecían en vano, se había iniciado la guerra entre las elites de la medicina mundial por obtener el reconocimiento de ser quien descubriera el origen del SIDA, y ésta guerra había desatado a su vez una carrera de ambiciones y egos entre varios grupos de médicos y laboratorios que se peleaban por encontrar una respuesta “científica” a qué era lo que estaba causando que las personas desarrollaran inmunodeficiencia o SIDA. Todo esto sucedía mientras la nueva “epidemia” seguía cobrando vidas en todo el mundo a ritmo cada vez más acelerado como si realmente se tratara de un caballo apocalíptico. Mientras esto sucedía en el planeta, en los E.U. las presiones políticas y sociales eran cada vez más intensas sobre el equipo de médicos del gobierno encargados de la investigación, fue así, bajo este panorama de presiones y una enorme cantidad de intereses económicos creados, que en ese mismo año de 1984, el 24 de Abril, un doctor de nombre Roberto Gallo, con el apoyo de las autoridades de salud norteamericanas, convocaron a la conferencia de prensa que dio nacimiento al mito del virus VIH. En esta apresurada y casi obligada conferencia de prensa llevada a cabo en el NCI (National Cancer Institute), éste médico anunciaba que por vez primera en la historia de la medicina moderna, ÉL había logrado “aislar” al virus que según se había descubierto, era la POSIBLE causa del SIDA y que al virus resultado de su investigación se le había dado el nombre de HTLV-III; es decir, el Dr. Gallo declaraba que por fin se había descubierto que un virus era el que daba origen a la enfermedad del SIDA. De esta forma arbitraria y por iniciativa propia, Gallo decretó existente a este nuevo virus sin haber tenido una comprobación científica con el mismo resultado y sin dar seguimiento a una investigación protocolaria completa; si se revisa a fondo la información sobre su investigación se podrán descubrir varios “huecos” u omisiones en los procesos que se siguieron previos a la conferencia de aquel día. Gallo sabía esto y sabía también que en realidad el virus no había sido aislado jamás en un laboratorio, lo que él y su equipo habían encontrado en sus investigaciones no tenía el suficiente sustento científico para ser validado por la ciencia médica mundial como el verdadero descubrimiento de un nuevo retrovirus, como se hace siempre que algún médico del planeta descubre algo. Cada vez que alguien realiza algún descubrimiento en el mundo de la medicina, éste se somete a análisis por la comunidad científica del planeta a través de publicaciones en revistas especializadas y teniendo congresos internacionales para discutir los resultados de dichas investigaciones y sólo después de confirmar toda la información se difunde como algo cierto. Sin embargo el Dr. Roberto Gallo con este acto irresponsable de realizar una conferencia de prensa y anunciar algo no comprobado, violó toda la metodología y el protocolo médico reconocido y creado por la propia comunidad médica mundial que se aplica para las investigaciones que estudian las enfermedades de cualquier tipo. Pero ¿por qué hacer algo así? Casi nadie sabe que al día siguiente de esta conferencia de prensa el “intachable” Dr. Gallo presentó ante las autoridades norteamericanas la solicitud de patente para la elaboración de los “test” que detectarían los anticuerpos del virus que él había descubierto. Al poco tiempo, la FDA (Food and Drug Administration) de los Estados Unidos aprueba la patente de Gallo justo cuando los primeros ‘kits’ para estas pruebas de sangre se encuentran listos para salir al mercado. Si se analiza bien, no se necesita ser un genio para poder vislumbrar las razones por las que se realizó tal conferencia de prensa: DINERO… Todo fue por dinero y por querer obtener a como dé lugar el prestigio y reconocimiento del mundo médico. Por si esto fuera poco, y como muestra del comportamiento de algunos “hombres de ciencia”, resulta que a finales de ese mismo año y a manera de reacción iracunda, los Laboratorios Pasteur de Francia al ver el éxito en las ventas de las pruebas de detección de Gallo, presentan una demanda al NCI reclamando parte de las utilidades generadas por la venta de los test para VIH argumentando que el Dr. Gallo había ROBADO el virus de sus instalaciones. ¿Qué virus se habrá robado Gallo si todo indica que jamás ha sido aislado? ¿En que planeta vivimos por el amor de Dios?… Esto es repugnante y nos deja ver una pequeña parte de toda la verdad oculta en la historia que conocemos detrás del VIH desde 1984. Pero no se debe creer que Gallo solo logró imponer su mentira, resulta que para terminar de “apuntalar” la afirmación sobre el nuevo virus, y a manera de “señal” para todo aquel que quisiera retar a la versión de Gallo, la secretaria de Salud y Servicios Humanos del gobierno norteamericano, Margaret Heckler, declara en una entrevista a los medios de comunicación que “confiaba que ésta sería una breve epidemia”, o sea que el gobierno norteamericano aceptaba oficialmente la existencia de una epidemia por la existencia de un virus asesino, y para rematar, en otra parte de esa entrevista dijo que “se tendría una vacuna para el virus y una cura para el SIDA antes de 1990″. Señal inequívoca de que ya se había echado a andar la maquinita que les dejaría cuantiosas ganancias a ciertos laboratorios. Sin duda alguna para ese entonces, el dinero ya invertido durante varios años en investigación de la teoría viral ya tenía bastantes ceros en las chequeras de los inversionistas y los intereses de ciertas compañías de laboratorios que fabricarían las vacunas y las pruebas de detección para el tan buscado virus se convertían cada vez más en un factor de importancia y de presión para que se dieran resultados a la opinión pública mundial confirmando que ya se había encontrado al “enemigo a vencer”. Esta situación y la urgencia del gobierno norteamericano por tenerle respuestas a quienes habían puesto toneladas de dinero en esas investigaciones prácticamente obligaron a los médicos del NCI a crear alguna teoría que fuera creíble y que los beneficiara
SÍNTOMAS DE EL SIDA
¿Cuáles son los síntomas del VIH y de SIDA?
No es posible diagnosticar en forma confiable la infección por VIH o SIDA cuando solamente se tienen en cuenta los síntomas. La única manera de saber con seguridad si una persona está infectada con VIH es realizarse una prueba de detección del VIH.
Las personas que viven con VIH pueden sentirse y verse completamente bien. No obstante, es posible que sus sistemas inmunológicos estén dañados. Es importante recordar que una vez que alguien está infectado con VIH puede transmitir el virus de forma inmediata, incluso si tal persona se siente saludable.
El VIH es el virus del SIDA. Si una persona que está infectada con VIH no realiza un tratamiento antirretrovírico eficaz, el VIH debilitará su sistema inmunológico con el pasar del tiempo. En consecuencia, se volverá más vulnerable a las infecciones oportunistas.
Síntomas provocados por las infecciones oportunistas
Estas infecciones son provocadas por gérmenes que nos rodean todo el tiempo, pero que normalmente pueden ser combatidos por un sistema inmunológico sano. Cuando el sistema inmunológico está lo suficientemente debilitado, tales infecciones se desarrollarán y producirán una amplia variedad de síntomas, algunos de los cuales pueden manifestarse con intensidad. Algunos tipos de cáncer también pueden volverse más comunes cuando el sistema inmunológico está debilitado.
Tales síntomas, no obstante, no pueden interpretarse como signos definitivos de infección por VIH o SIDA. Un diagnóstico de SIDA requiere de signos que manifiesten una deficiencia inmunológica importante y cuya aparición no puede ser explicada por ningún otro factor excepto el VIH. Para ello, suele ser necesaria una prueba de detección del VIH.
Síntomas posteriores a la infección por VIH
Algunas personas que están infectadas con VIH no advierten ningún cambio inmediato en su salud. Sin embargo, algunos padecen gripes cortas a las pocas semanas de infectarse o bien desarrollan sarpullidos y se les inflaman los ganglios. Estos síntomas no indican el desarrollo de SIDA y, en general, desaparecen a los pocos días o semanas.
"Tengo los típicos síntomas de gripe/se me han inflamado los ganglios, ¿podría ser VIH?”
Muchas enfermedades presentan los síntomas de la gripe o provocan la inflamación de los ganglios. No se puede contraer VIH a menos que se haya estado expuesto directamente al virus. El VIH puede transmitirse durante las relaciones sexuales con una persona infectada, a través del contacto con sangre o leche materna infectada o bien, durante la aplicación de inyecciones o la realización de procedimientos médicos poco seguros. Si no está seguro de si lo anterior se aplica a su situación, lea nuestra página acerca de cómo puede o no infectarse con el virus del VIH.
La única manera de saber si está o no infectado con el VIH es a través de una prueba de detección de este virus.
¿QUÉ ES EL SIDA?
El sida (acrónimo de síndrome de inmunodeficiencia adquirida) es una efermedadque afecta a los humanos infectados por el VIH. Se dice que una persona padece de sida cuando su organismo, debido a la inmunodeficiencia provocada por el VIH, no es capaz de ofrecer una RESPUESTA INMUNE adecuada contra las infecciones.
Cabe destacar la diferencia entre estar infectado por el VIH y padecer de sida. Una persona infectada por el VIH es seropositiva y pasa a desarrollar un cuadro de sida cuando su nivel de celulas que ataca el virus, desciende por debajo de 200 células por mililitro de sangre.
El VIH se transmite a través de los siguientes fluidos corporales: sangre, semen, secreciones vaginales y lechematernal.
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